viernes, 16 de julio de 2010

LA LUZ EXHUMADA



El signo muerto del arte lo firma el artista, recordaba. Quien sigue con las huellas y los naufragios de la memoria está trazando sobre la cal, con arena y viento. Lo ves sentado sobre el malecón en otra tarde de verano, mira ahora las luces del poniente, la tiniebla calurosa en la casa del horizonte, los cuerpos oscuros y húmedos que traen la quemada luz, una deriva para el corazón de la noche. Lugares y fantasmas, una nada de sueños extendida sobre la nada, que otros vivieron y escribió Broch.




LA LUZ EXHUMADA



De pronto, en la calurosa tarde,


la olvidada y extraña intensidad


vuelve por una calle solitaria


a la bodega perdida y sombrosa.


Entrabas en tu cuerpo y en el mundo


con la honda luz de la noche del mar,


ella en los lentos sueños del verano.


Su voz de lucidez o de locura


te borran con esta memoria errante,


con esta nada después del naufragio.



Julio, 1999



2 comentarios:

Marisa Peña dijo...

Me conmueve sa nada después del naufragio...y esa honda luz de la noche en el mar, y los lentos sueños de verano.
Que el arte nos acompañe.Un abrazo enorme, desde el mar.

José Luis Garrido Peña dijo...

Gracias, querida Marisa, espero que estés pasando unas buenas y merecidas vacaciones, disfrutando de la familia, los paisajes, los libros.

Un beso.