sábado, 2 de febrero de 2013

DEL CAPITALISMO, DEL FRANQUISMO.

Fot. Diario Público


Ver, oír, en boca de algunos monaguillos la denuncia de la corrupción, simpatizantes del arco de las políticas que nos han llevado hasta aquí, repugna. Monaguillos, por lo demás, de un analfabetismo político extremo.


Se puede también meter en el cóctel a muchos ladradores, consumidores frustrados, cañis, votantes peperos, franquismo sociológico, nacional católicos, falangistas trasnochados, anómimos de ideologías secretas del corazón, etc., etc., y cuidado con los compañeros de viaje, aquí quien más gana es el cadavérico sistema que quiere morir matando, la derecha, que siempre vota unida, como en la misa de las doce. En fin, juntos y revueltos.



1 comentario:

Ramón Velarde dijo...

Por España, todo por España, acto de reafirmación nacional de cañis. Conspiración judeo masónica. Ahora hay muchos cabreados, pero antes ni pio, se nota que ha bajado el consumo. Decir lo que se piensa es una conquista personal exigente, auqnue lo veten en muchos sitios

Saludos y enhorabuan Luis